CENTRO RURAL DE FORMACION EN ALTERNANCIA EN EL PERÚ
¿Qué es un CRFA?
· Un Centro Rural de Formación en Alternancia o CRFA es una Institución Educativa de formación profesional para jóvenes de Nivel Secundario, promovido por un grupo de padres de familia y actores sociales empeñados en el desarrollo de su comunidad.
· El Centro Rural de Formación en Alternancia (CRFA) busca preparar muy bien a los jóvenes y, junto con sus padres, impulsar el desarrollo de sus comunidades de modo continuo y eficaz.
· Centros como estos van multiplicándose por los 5 continentes. Los beneficios de esta propuesta educativa se comprueban en el Perú en 38 CRFA ubicados en las regiones de Apurímac, Arequipa, Cajamarca, Cusco, Huánuco, La Libertad, Lambayeque, Lima Provincias, Piura, Puno y San Martín.
El CRFA se sostiene en 4 columnas:
Durante los días 22, 23 y 24 del mes de setiembre, se llevó a cabo en Lima el IX Congreso Mundial de la AIMFR: Educación en Alternancia para el desarrollo rural, que contó con la presencia de las delegaciones de 41 países que desarrollan esta modalidad así como de representantes de los gobiernos regionales y especialistas en temas de educación de diferentes instituciones nacionales e internacionales invitadas. Para entender qué es la Educación en Alternancia y su propuesta pedagógica.
¿Por qué “alternancia”?
Se designa “en alternancia” porque los estudiantes no concurren diariamente a la institución educativa, sino que permanecen en un sistema de internado durante quince días y la otra parte del mes están en sus hogares trabajando con sus padres y participando en la vida de su comunidad, lo que hace que la construcción curricular se “alterne” en estos dos espacios y tiempos complementarios: el medio familiar-social-laboral y el centro educativo.
¿Qué propone la Pedagogía de la Alternancia?
Es una realidad conocida por todos, que muchos niños y jóvenes egresados de las escuelas primarias de las zonas rurales no continúan sus estudios secundarios porque no tienen un colegio de este nivel en su comunidad, lo que implica tener que desplazarse largas distancias cada día o separase de su familia.
La Pedagogía de la Alternancia busca integrar los dos espacios: escuela – familia, en una unidad de aprendizaje a través de un plan de formación que se estructura participativamente, teniendo como base el diagnóstico situacional del medio y los aportes de los diversos actores: padres de familia, profesionales, autoridades, monitores, estudiantes, etc. y basado en el Diseño Curricular Nacional. Así, la Pedagogía de la Alternancia representa una alternativa válida para satisfacer el derecho de los adolescentes de las localidades rurales apartadas y dispersas a culminar su educación básica.
¿Cómo se integran estos dos espacios?
La Educación en Alternancia permite al joven estudiante desarrollarse dentro de su comunidad apoyando y trabajando en casa de sus padres y al mismo tiempo recibir una formación que incluye cursos elaborados a partir de las condiciones socioeconómicas de su localidad a través del desarrollo de Proyectos Productivos aplicables a la zona.
A través del desarrollo de estos proyectos se busca desarrollar en los estudiantes capacidades de emprendimiento e innovación orientados a favorecer el crecimiento económico familiar y comunal, evitar la migración hacia las zonas urbanas y fortalecer la identidad cultural. Las características mencionadas hacen de ésta, una propuesta equitativa, participativa y vivencial, porque el joven se forma en su entorno social y aprende lo relacionado a su ámbito de desarrollo.
¿Quiénes son sus actores?
La Educación en Alternancia hace posible una real y permanente interacción entre el medio y la escuela mediante la participación activa y responsable de los diversos agentes que influyen en el proceso formativo: maestros, padres, madres, representantes y autoridades locales.
El docente recibe el nombre de monitor y debe poseer cualidades para el trabajo en equipo con sus colegas y para la convivencia con los estudiantes. Su función se desarrolla más allá del centro pues es también impulsor del desarrollo del medio, consejero familiar e investigador permanente de la realidad.
Los padres y madres de familia deben entender su responsabilidad en la educación de sus hijos pues son parte de la gestión asociativa de los centros de formación y su participación es vital dentro de todo el quehacer educativo.
En conclusión, esta propuesta educativa de inclusión y desarrollo bien merece tomarse en cuenta como una alternativa válida para la formación de nuestros jóvenes de las zonas.
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